El Ministerio de Educación, a través de la Subsecretaría de Educación Técnico Profesional, puso en marcha en la ciudad de General Pico un proceso de gran trascendencia institucional: la firma de actas de titularización para más de 80 cargos de Instructores e Instructoras de Formación Profesional.
Este procedimiento, que continuará en las ciudades de General Acha y Santa Rosa, busca abarcar a la totalidad de los Centros Provinciales de Formación Profesional convocados, consolidando así un avance histórico en el reconocimiento y jerarquización de la tarea docente en esta modalidad.
La subsecretaria de ETP, Daiana Schapert Berpof, señaló en diálogo con la Agencia Provincial de Noticias que este paso constituye una definición política clave: “Con esta decisión damos un salto cualitativo en la jerarquización de la Formación Profesional. Reconocemos la trayectoria y el compromiso de quienes sostienen, con su trabajo cotidiano, una modalidad esencial para la inclusión educativa y laboral. Titularizar era una deuda histórica con nuestros instructores e instructoras, y hoy comenzamos a saldarla”.
La funcionaria remarcó que este proceso no se agota en la actual instancia, sino que marca el inicio de un camino de transformaciones más profundas. “Nuestro objetivo ahora es avanzar en una normativa específica que permita sistematizar los procesos de titularización, de modo que la Formación Profesional cuente con reglas propias y adecuadas a su especificidad. Ello incluirá también al resto de los cargos de la FP, garantizando estabilidad laboral, previsibilidad y un marco normativo acorde a la realidad de esta modalidad”, explicó.
La iniciativa se enmarca en el Plan Estratégico Trianual de Mejora de la Formación Profesional, elaborado en 2023, que contempla una serie de ejes estratégicos: la creación del Consejo Consultivo de FP, el diseño de nuevos procesos de designación con valoración integral de perfiles, la reestructuración progresiva de cargos y funciones, la recategorización y provincialización de instituciones, la actualización curricular y del catálogo de ofertas formativas, el fortalecimiento de la Red de Directores y Directoras, la certificación de jornadas institucionales, y la renovación normativa y asegurativa de las prácticas profesionalizantes.
En paralelo a estas medidas, ya comenzó la distribución de herramientas e insumos destinados a distintas familias profesionales, con una inversión que alcanza los 130 millones de pesos, apuntalando así la calidad de la enseñanza y la actualización tecnológica en los talleres y espacios de práctica. Esta inversión se suma a un conjunto de políticas de fortalecimiento de la Educación Técnico Profesional desplegadas en todo el territorio provincial, con el propósito de vincular cada vez más estrechamente la educación con el desarrollo productivo local y regional.
El proceso de titularización, junto con las medidas complementarias, expresa con claridad la decisión política de la Provincia de consolidar la Formación Profesional como un pilar central del sistema educativo pampeano. Se busca no solo garantizar la estabilidad de los y las docentes, sino también proyectar un modelo educativo que brinde igualdad de oportunidades, facilite la inclusión social y laboral, y contribuya al arraigo de las y los jóvenes en sus localidades.
De esta manera, La Pampa reafirma que la educación técnico profesional no puede considerarse un espacio secundario o complementario, sino que constituye un elemento estratégico para el desarrollo con equidad, la construcción de ciudadanía y la generación de un futuro con trabajo digno en cada rincón del territorio provincial.
