Después de años de espera y una profunda remodelación, el Hotel Valle Andino volverá a abrir sus puertas en julio en Uspallata.
Se trata de uno de los establecimientos más emblemáticos de la alta montaña mendocina, que renace con una propuesta renovada pero sin perder la esencia que lo convirtió en un referente turístico desde su inauguración en 1990.
El proyecto fue impulsado por la familia Cavallaro. Roberto, su fundador, adquirió el hotel en 2020 con la idea de recuperar un espacio con historia y proyectarlo al futuro. Hoy es su hijo Pablo, de apenas 27 años, quien lidera la reapertura. “Reabrir Valle Andino no es sólo un homenaje a él, sino una apuesta al futuro, a la tierra que amamos y al turismo local e internacional”, señaló el joven empresario.
La nueva etapa del hotel incluye habitaciones completamente renovadas, una propuesta gastronómica destacada con el restaurante La Barrosa —centrado en la cocina al horno de barro— y el Andino Wine Bar, donde se podrán degustar etiquetas mendocinas. También ofrecerá actividades personalizadas como cabalgatas, caminatas, pesca, yoga y meditación, apuntando a generar experiencias integrales en contacto con la naturaleza.
Como parte de su estrategia de reapertura, el establecimiento lanzó una promoción exclusiva para residentes mendocinos: un 25% de descuento en las reservas realizadas hasta el 30 de junio, válidas para todo el año. El beneficio se obtiene mediante el código promocional MANSO en la web oficial del hotel, y requiere validación del domicilio al momento del check-in.
Situado a 120 kilómetros de la capital provincial y en cercanías de sitios icónicos como el Aconcagua y Puente del Inca, Valle Andino busca consolidarse como una alternativa tanto para el turismo nacional como internacional. Su reapertura simboliza una apuesta por el desarrollo local, la identidad regional y el valor de los proyectos familiares sostenidos con esfuerzo.
