
El Gobierno de La Pampa volvió a insistir ante autoridades nacionales en la necesidad de alcanzar acuerdos concretos que permitan garantizar la continuidad de obras estratégicas y la preservación de derechos adquiridos por la población pampeana.
En una reunión encabezada por el ministro de Obras y Servicios Públicos, Alfredo Intronati, se puso sobre la mesa la delicada situación generada a partir de la decisión del actual Gobierno nacional de discontinuar el financiamiento de obras públicas en ejecución dentro de la Provincia.
Desde ese recorte, La Pampa se vio obligada a sostener con fondos propios proyectos esenciales para evitar su paralización. Esta estrategia fue posible gracias a la decisión política del gobernador Sergio Ziliotto y al respaldo legislativo otorgado mediante la aprobación del proyecto de necesidad pública, que habilitó herramientas financieras extraordinarias. Con ellas se logró preservar la continuidad laboral y evitar que infraestructuras de alto impacto social quedaran inconclusas.
Entre las obras ya finalizadas con recursos provinciales se destacan Centros de Desarrollo Infantil, mejoras viales, ampliaciones de redes de saneamiento, viviendas y otras intervenciones significativas.
Para el ministro Intronati, este esfuerzo “representa un ejercicio de autonomía financiera que permite sostener y ampliar una infraestructura esencial vinculada al acceso al agua, la conectividad vial, la vivienda, la educación, la salud y la seguridad. Además de cubrir necesidades reales, la obra pública continúa siendo un motor para el empleo y la economía local”.
Tres ejes planteados ante Nación
Durante el encuentro con el subsecretario nacional de Ejecución de Obras Públicas, Jorge Ríos, la Provincia presentó tres temas centrales, todos orientados a destrabar proyectos cuyo avance impacta directamente en la calidad de vida de miles de familias pampeanas.
Finalización de los desarrollos urbanísticos Procrear
El ministro planteó la urgencia de finalizar las viviendas Procrear ubicadas en Santa Rosa, Toay y General Pico, que en conjunto significan una respuesta habitacional para 636 familias. Estas obras, iniciadas en terrenos cedidos por la Provincia, se encuentran paralizadas debido a la falta de financiamiento nacional.
Intronati explicó que existe la posibilidad de que Nación traspase formalmente estas obras a la Provincia, lo que permitiría continuar los trabajos sin nuevos retrasos. La Pampa, que adhirió al régimen de deuda, podría compensar el valor de las mejoras y recibir la transferencia de los contratos sin arrastre de obligaciones. “Esto agilizaría la ejecución y garantizaría que cientos de familias puedan finalmente acceder a su vivienda”, señaló el ministro.
Continuidad del Acueducto Santa Rosa – General Pico
El segundo punto abordado fue el acueducto Santa Rosa–Pico, una infraestructura vital para garantizar la calidad y la disponibilidad de agua potable en una amplia zona del norte provincial. Aunque el proyecto aparece incluido en el Presupuesto Nacional 2026 y cuenta con financiamiento del Fondo Hídrico, aún no hay definiciones operativas sobre su reactivación.
Según Intronati, la falta de avances pone en riesgo una obra que no solo tiene un fuerte impacto sanitario y social, sino también económico, dado que su ejecución genera empleo genuino y dinamiza la actividad de proveedores y empresas locales. “Necesitamos una decisión clara de Nación que evite seguir postergando un servicio esencial para miles de pampeanos”, remarcó.
Futuro de las rutas nacionales en La Pampa
El tercer planteo se centró en la situación de la red vial nacional que atraviesa el territorio provincial. La Pampa esperaba la presencia del secretario de Transporte, Luis Pierrini, para evaluar este tema, pero el funcionario no asistió por motivos de agenda.
Los corredores de las rutas nacionales 5 y 188 pasarán a concesión, de acuerdo con los pliegos preliminares difundidos por Nación. Sin embargo, sigue sin definirse quién se hará cargo del mantenimiento del resto de las rutas nacionales, que no serán concesionadas. La incertidumbre es mayor debido a los recortes en el financiamiento de Vialidad Nacional y a la reducción del impuesto a los combustibles, que históricamente aportaba recursos clave.
“El riesgo es claro: sin presupuesto para conservación vial, la calidad y seguridad de las rutas podrían deteriorarse rápidamente”, advirtió Intronati. Además, destacó que si bien las empresas concesionarias garantizarán solo la transitabilidad mínima en sus corredores, las mejoras estructurales quedarían sin responsable definido. “Para La Pampa, esto es crucial: hablamos de la seguridad de los usuarios, del movimiento productivo y de la conectividad regional”.