La ceremonia de apertura de los XXXII Juegos Binacionales de la Araucanía, realizada en el Anfiteatro del Centro Cívico de Santa Rosa, marcó el inicio de una edición profundamente significativa para el deporte patagónico y del sur chileno.
Con la presencia del Gobernador Sergio Ziliotto, funcionarios provinciales, autoridades municipales y las delegaciones de todas las provincias y regiones participantes, el acto combinó emoción, reconocimiento y un fuerte mensaje de integración binacional.
Una edición salvada “contra reloj”
La Pampa fue protagonista central de esta edición. Tras la renuncia de Tierra del Fuego a organizar los Juegos —una decisión forzada por la difficile situación económica nacional—, la continuidad de la competencia estuvo en riesgo. Fue entonces cuando el Gobierno pampeano tomó la decisión de asumir la organización en un plazo inusualmente corto: apenas diez semanas para preparar una infraestructura que habitualmente demanda más de un año de trabajo.
En los discursos oficiales, esta determinación fue uno de los puntos más destacados.
El subsecretario de Deportes, Ceferino Almudévar, recordó que suspender los Juegos habría significado una pérdida irreparable para una competencia que lleva más de tres décadas y ha reunido ya a 80 mil jóvenes deportistas desde su creación. Almudévar remarcó la frase que le transmitió el Gobernador al tomar la decisión: “La Pampa no va a los Juegos, La Pampa ama los Juegos”, sintetizando el compromiso provincial con esta iniciativa de integración regional.
También el presidente del Comité Ejecutivo de los Juegos, Mauro Salinas Egli, elogió la valentía institucional y política de La Pampa. Subrayó que, ante el imprevisto, la provincia “se puso la competencia al hombro”, organizando la edición en tiempo récord y evitando que se perdiera una tradición de más de 30 años.
Un acto con fuerte carga simbólica
Durante la ceremonia se entregaron diplomas de reconocimiento a referentes históricos del deporte patagónico: dirigentes, coordinadores y responsables de distintas provincias que sostuvieron los Juegos a lo largo del tiempo. Entre los homenajeados estuvieron Marcelo Cobián (Tierra del Fuego), Mario Grillo (Santa Cruz), Marcelo Sibold (Río Negro), Luis Sánchez (Neuquén), Walter Ñonquepán (Chubut) y Ruperto Cheuquén (Bio Bio).
Las palabras de Ñonquepán, al agradecer la organización pampeana, fueron uno de los momentos más aplaudidos de la noche.
El cierre del acto llegó con otro clásico de los Juegos: el encendido de la antorcha, a cargo del judoca pampeano Alejo Tomás Quinteros, que dejó oficialmente inaugurada la competencia.
Más de 2.600 deportistas en acción
La edición 2024 reúne a 2.600 atletas de las provincias patagónicas argentinas y de las regiones del sur de Chile, quienes competirán en siete disciplinas:
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Atletismo
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Judo
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Natación
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Ciclismo
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Fútbol
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Vóley
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Básquet
La geografía pampeana se transformó, durante varios días, en un gran escenario deportivo distribuido entre numerosas localidades:
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Santa Rosa: atletismo, judo, fútbol y básquet masculino.
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Autódromo Provincia de La Pampa y RP 14: ciclismo.
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General Acha: básquet femenino y masculino, y vóley femenino.
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Ataliva Roca, Quehué: vóley femenino.
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Miguel Riglos: natación en el recientemente inaugurado natatorio.
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Eduardo Castex: vóley masculino.
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General Pico: fútbol femenino.
La TVPP realiza una cobertura integral en todas las sedes, mientras que los resultados pueden seguirse en tiempo real mediante el sistema oficial Tremun.
Los Juegos Binacionales de la Araucanía vuelven a dejar en evidencia su enorme valor cultural, deportivo y social: un espacio donde miles de jóvenes se forman, compiten, crean lazos y fortalecen una integración histórica entre ambos lados de la cordillera. Este año, ese espíritu se potencia aún más gracias al esfuerzo extraordinario de La Pampa por mantener viva la tradición.
