
La Diplomatura en Ecología y Gestión Territorial tuvo este viernes un cierre de cursada significativo en Chacabuco, marcando el final de un proceso formativo que, según lo expresado en la ceremonia, dejó una huella importante en los participantes y en las instituciones involucradas.
El acto fue encabezado por María Karina Geloso, quien representó al intendente Darío Golía. En sus palabras, destacó el valor estratégico que tiene hoy la formación ambiental para los municipios, especialmente en un contexto donde la gestión sostenible del territorio se vuelve cada vez más urgente.
Subrayó también la articulación entre el gobierno local y las instituciones académicas como un pilar fundamental para promover políticas públicas mejor informadas y más sensibles a las problemáticas socioambientales de la región.
La nota periodística resalta que la diplomatura proporcionó a los estudiantes un conjunto de herramientas clave orientadas al mercado de trabajo local y regional, incluyendo criterios de planificación territorial, análisis de impacto ambiental, gestión de recursos naturales y enfoques contemporáneos de sostenibilidad. Esta formación, según se indicó, no solo amplía las capacidades técnicas de los cursantes, sino que además contribuye a generar perfiles profesionales cada vez más demandados por organismos públicos, organizaciones civiles y empresas que buscan incorporar prácticas responsables con el ambiente.
Otro punto relevado fue la importancia de promover nuevas miradas sobre el ambiente. La diplomatura impulsó el desarrollo de una visión integral y multidisciplinaria, entendiendo al ambiente no solo desde su dimensión ecológica, sino también desde sus componentes sociales, culturales y económicos. Esto permitió que los participantes reflexionaran sobre los desafíos específicos de Chacabuco y la región, así como sobre la necesidad de construir estrategias de desarrollo que equilibren el crecimiento con la protección de los recursos naturales.
Finalmente, la coordinadora universitaria, Marisa Marcor, felicitó a los egresados, reconociendo el esfuerzo sostenido de todo el grupo y destacando la diversidad de perfiles que enriquecieron el intercambio académico. Señaló que la finalización de la cursada no constituye un cierre, sino un punto de partida para continuar profundizando el compromiso con la gestión ambiental y el desarrollo sostenible en cada ámbito de actuación profesional.
La jornada concluyó con un clima de celebración, orgullo e impulso hacia futuros proyectos vinculados a la ecología y el territorio, reafirmando la importancia de este tipo de propuestas educativas para el fortalecimiento comunitario y la planificación ambiental de largo plazo.