El Gobierno de La Pampa llevó adelante un nuevo y amplio simulacro de respuesta ante derrames de hidrocarburos en el Lago Casa de Piedra, reforzando su estrategia preventiva para proteger los recursos hídricos provinciales.
La actividad fue organizada por las Secretarías de Energía y Minería, Ambiente y Cambio Climático, y Recursos Hídricos, junto con las empresas que operan en las áreas hidrocarburíferas pampeanas, en el marco del Protocolo Integral de Monitoreo Preventivo y de Contingencias vigente desde 2018.
Un ejercicio de gran escala y participación interinstitucional
Este fue el simulacro Nº 16 y se desarrolló en la zona cercana a la estación de piscicultura, un punto estratégico por su proximidad al espejo de agua y por su sensibilidad ambiental. El objetivo central fue fortalecer la capacidad operativa y de coordinación frente a posibles derrames, garantizando que los equipos públicos y privados cuenten con entrenamiento actualizado para actuar con rapidez y eficacia.
Entre los participantes estuvieron la subsecretaria de Ambiente, Mónica Álvarez; el secretario de Recursos Hídricos, José Gobbi; el director de Minería e Inspecciones, Cristian Buss; el representante del COIRCO, Juan Greco; además de personal de Defensa Civil, bomberos voluntarios del cuartel de 25 de Mayo y equipos técnicos del Departamento Provincial de Aguas de Río Negro y de la Secretaría de Energía de Neuquén. También intervinieron especialistas de las empresas que integran el Protocolo: Pluspetrol S.A., Petroquímica Comodoro Rivadavia S.A., Pampetrol S.A.P.E.M., Medanito S.A. y Refipampa S.A.
Capacitación y maniobras en condiciones reales
Durante la etapa preparatoria, el equipo de Emergencias Petroleras capacitó a representantes técnicos de las empresas y de los organismos estatales en métodos específicos de recuperación de hidrocarburos en cuerpos de agua, incluyendo técnicas de contención, confinamiento y recolección que se aplican en lagos, ríos y embalses.
El ejercicio incluyó un desafío adicional para los bomberos voluntarios de 25 de Mayo, quienes debieron ingresar al lago en una embarcación para monitorear el comportamiento de la “mancha” simulada y participar activamente de las maniobras de recupero. Esto permitió ensayar la coordinación entre los equipos terrestres y los que operan sobre el agua, un aspecto crítico en cualquier contingencia real.
Para representar el derrame se utilizaron trazadores naturales —cáscaras de girasol— que permiten evaluar la dispersión de una mancha sin generar impacto ambiental. Con este método se simularon escenarios críticos, como variaciones en el viento, corrientes internas y comportamiento de los materiales flotantes, lo que aporta información clave para mejorar los tiempos de respuesta y la precisión operativa.
Un compromiso sostenido con la protección del agua
Según destacó Cristian Buss, “la jornada volvió a demostrar la solidez del trabajo coordinado entre organismos públicos, entidades especializadas y el sector privado”. El funcionario subrayó que este tipo de ejercicios constituye una herramienta esencial para fortalecer la estructura preventiva y garantizar que La Pampa esté preparada para actuar incluso en contextos adversos.
Desde la implementación del Protocolo en 2018 se han realizado 16 simulacros de creciente complejidad, abarcando distintos escenarios operativos y condiciones ambientales. Esta continuidad ha permitido consolidar rutinas de actuación, mejorar la comunicación entre los equipos y ajustar los procedimientos técnicos a los estándares actuales.
El principal propósito de estas acciones es minimizar riesgos ambientales, asegurar respuestas rápidas y coordinadas, y proteger recursos fundamentales como el Río Colorado y el Lago Casa de Piedra, pilares no solo de la vida ambiental sino también del desarrollo económico y productivo pampeano.
Con cada ensayo, la provincia reafirma su compromiso con la prevención, la gestión responsable del recurso hídrico y el desarrollo sostenible del sector energético y minero.
