Las mejoras que se están llevando adelante en el barrio Centro Empleados de Comercio representan una intervención integral, financiada en su totalidad con recursos de la Municipalidad de Santa Rosa, que busca modernizar la infraestructura vial y de servicios de un sector clave de la ciudad.
Los trabajos comenzaron la semana pasada con la repavimentación de calles, una tarea largamente esperada por los vecinos, ya que el pavimento original data de 1983. En total, se prevé la repavimentación de 17 cuadras y el bacheo integral de las arterias restantes, lo que permitirá mejorar de manera significativa la circulación vehicular y peatonal, aportando mayor seguridad y accesibilidad. Además, se realizarán 450 metros lineales de renovación de cloacas, una obra fundamental para garantizar un mejor funcionamiento de los servicios sanitarios en la zona.
La inversión asciende a 700 millones de pesos y se financia con fondos propios de la administración municipal. El intendente Luciano di Nápoli destacó la magnitud de este plan al calificarlo como una “obra histórica”, ya que responde a una demanda sostenida de los vecinos y apunta a transformar de manera estructural el barrio. Según explicó, el plazo estimado para la finalización de los trabajos es de 90 días, lapso en el cual se avanzará no solo en la infraestructura vial sino también en mejoras urbanísticas complementarias.
En paralelo con las tareas de repavimentación y bacheo, se está trabajando en la señalización horizontal y vertical. Esta incluye la pintura de sendas peatonales, cordones, líneas de detención para vehículos, cebrados en ochavas y demarcación de estacionamiento exclusivo para motos. También se contempla la señalización específica en puntos sensibles como la Escuela N° 25 “Granaderos de San Martín” y el jardín de infantes ubicado en la misma manzana, así como la instalación de rampas de acceso y reductores de velocidad para reforzar la seguridad vial, especialmente en zonas escolares y de gran tránsito peatonal.
La obra se complementa con la producción de 1.700 toneladas de asfalto elaborado en la propia Planta Municipal, lo que permite optimizar los costos y garantizar la calidad del material utilizado. Este enfoque productivo demuestra la capacidad de la Municipalidad para llevar adelante proyectos de gran envergadura con recursos y equipos propios.
El impacto de estas mejoras será amplio, ya que no solo beneficiará a los vecinos del barrio, sino también a las familias que a diario circulan hacia la escuela, la posta sanitaria, el comedor comunitario, los comercios de la zona y la sucursal bancaria. En este sentido, el proyecto trasciende lo meramente vial y se convierte en una intervención urbana integral que fortalece la vida comunitaria y potencia la dinámica social y económica del sector.
En palabras del propio intendente, se trata de un barrio “histórico, muy querido y con un fuerte sentido de pertenencia por parte de sus vecinos”, lo que refuerza el valor simbólico de esta obra. Con estas intervenciones, la Municipalidad busca no solo reparar calles y renovar cloacas, sino también dar un paso concreto hacia una ciudad más moderna, segura y accesible.