
La semana pasada, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que depende de la Organización Mundial de la Salud (OMS), emitió una alerta epidemiológica debido al aumento de los casos de influenza, virus respiratorio sincitial (VRS) y SARS-CoV-2.
La OPS/OMS recomendó a los Estados Miembros fortalecer la vigilancia de estas enfermedades y tomar medidas necesarias para prevenir y controlar los casos graves.
En el caso de Argentina, se informó que la actividad de las infecciones respiratorias agudas graves (IRAG) estuvo en niveles basales, mientras que la actividad de la influenza aumentó ligeramente a principios de la temporada. El VRS se mantuvo en niveles más altos que en años anteriores, especialmente entre los niños menores de 2 años.
En la provincia de La Pampa, hasta el momento, los casos notificados de enfermedades respiratorias no superan lo esperado en comparación con años anteriores. Sin embargo, en esta época del año suelen manifestarse diferentes formas de enfermedades respiratorias, como resfríos, anginas, bronquiolitis y neumonía.
La directora de Epidemiología de la provincia, Ana Bertone, enfatizó la importancia de prevenir el contagio de estas afecciones respiratorias. Recomendó mantener al día las vacunas contra la influenza (vacuna antigripal) y el SARS-CoV-2, así como cumplir con el calendario de vacunas correspondiente a cada edad. La vacuna antigripal se recomienda especialmente para grupos de riesgo, como embarazadas, niños de 6 a 24 meses, personas mayores de 65 años y personas con factores de riesgo.
En cuanto a la vacunación contra la COVID-19, se establecieron recomendaciones específicas según la edad y la presencia de comorbilidades. Las personas a partir de los 50 años, aquellas con compromiso en la inmunidad y las embarazadas deben recibir refuerzos cada 6 meses. Las personas menores de 50 años con enfermedades crónicas u obesidad, el personal de salud y aquellos considerados estratégicos deben recibir refuerzos a los 6 meses desde la última dosis aplicada y continuar con dosis anuales. Las personas entre 6 meses y 49 años sin comorbilidades deben recibir refuerzos anuales.
En resumen, se recomienda fortalecer la vigilancia de las enfermedades respiratorias y adoptar medidas de prevención, como la vacunación, para reducir la propagación de la influenza, el VRS y el SARS-CoV-2.